El mundo inmobiliario no ha dejado de crecer y evolucionar. Antiguas prácticas que se creían efectivas, ahora no lo son (tanto). Y es que era de esperar que el avance de la tecnología irrumpiera en el terreno de la compra y venta de inmuebles.
Métodos que en el pasado tuvieron mucha relevancia a día de hoy pierden tracción y quedan obsoletos. Por ejemplo: ofrecer recorridos presenciales, mostrar las obras en plena construcción, explicar el resultado final con ayuda de planos, etc; ya no son la mejor opción para promocionar una vivienda.
Quédate a leer y descubre hacia dónde se dirige el sector inmobiliario y por qué los viejos procedimientos no son vigentes.
5 prácticas del sector inmobiliario que deberías replantearte
Como ya lo sabrás, desde que Internet llegó a nuestras vidas, la innovación aceleró su ciclo. Día a día salen más y mejores productos y servicios al mercado inmobiliario que no para de desarrollarse. Entre tanto, han ido quedando en el pasado o bien, se han tenido que optimizar, prácticas que ya no funcionan como anteriormente lo hacían.
A continuación te enseñamos cuáles son estos métodos y por qué resultan poco productivos en la actualidad. ¡Presta atención!
1- Recorridos presenciales
En primer lugar, tenemos a los afamados recorridos presenciales, que si bien aún se hacen, es necesario evaluar su indispensabilidad. Porque ha quedado demostrado a lo largo del tiempo, que las limitaciones de ubicación, disponibilidad de tiempo, trabas para establecer fechas, etc; son inconvenientes que desmotivan al comprador.
La velocidad de los tiempos en que vivimos es acelerada. Entre el trabajo, la casa, la familia, etc; cada vez es más difícil pasear por la ciudad visitando viviendas. De hecho, para movilizarse hasta el sitio es posible que exista tráfico, haya que cancelar planes de la agenda, y un sinfín de desventajas que hoy día hay maneras de contrarrestar.
2- Visitas en plena construcción
Las visitas en plena construcción por lo general terminan siendo visitas no productivas, y las razones son sencillas. Una de las principales, es que por mucho que el potencial comprador se esfuerce en visualizar la obra terminada, los elementos que predominan son los que aprecia al momento de visitar la propiedad.
Aunque se crea que el cliente siente ilusión por presenciar el proyecto desde un inicio, existen maneras más innovadoras de hacerlo partícipe. Y es precisamente la ayuda que brinda la tecnología hoy día, la cual le puede ahorrar mucho polvo a las narices de los compradores interesados. Así como también lo deja ser parte de las remodelaciones digitales, que luego se harían en la obra física.
3- Explicación con bocetos en físico
¡El material de apoyo de costumbre!, y el que más confunde a los clientes. Los bocetos en físico resultan sencillos y prácticos para los arquitectos, para los ingenieros, para los diseñadores y en cierto punto, hasta para los agentes inmobiliarios. Pero para el posible comprador, es probable que no le sea tan fácil de interpretar.
De hecho, los planos pueden explicar muy bien la distribución, pese a que este está en versión miniatura. No obstante, no logra recrearla a la perfección, o al menos el cliente no lo ve tal cual. Así como tampoco alcanza apreciar la decoración, los acabados y el resultado final.
4- Citas a todas horas
En la «vieja escuela» inmobiliaria, que sigue siendo la actual escuela de muchas agencias, lo común y rutinario es pautar citas a todas horas. Práctica que, sin dudas, termina siendo poco productiva, pese a que aparentemente debería ser lo contrario.
Esto ocurre, porque no todas las personas que visitan físicamente la vivienda están realmente interesadas en adquirirla. Y siendo así, la agenda del asesor inmobiliario puede estar a tope, pero al final, no es seguro que alguien compre o alquile el inmueble.
5- Promociones solo por canales tradicionales
Captar leads conlleva toda una estrategia y planificación, y por supuesto hay diversas maneras de hacerlo. Sin embargo, existen preferencias inmobiliarias antiguas que ya es momento de suplantar o complementar con otras. Tal es el caso de los canales tradicionales que en la actualidad aún se usan, pero no tienen tanta repercusión como antes.
Inclusive, habría que tomar en cuenta que hasta las generaciones que apreciaban los entornos convencionales, ahora los han dejado en segundo plano por las novedades digitales. En todo caso, la idea es no enfocarse en una única plataforma (mucho menos si es antigua) para dar a conocer tus ofertas inmobiliarias.
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Recomendaciones para ganar tiempo y vender más rápido tus inmuebles
Llegados a este punto ya sabrás qué prácticas inmobiliarias no son las mejores en pleno siglo XXI. Ahora bien, surge la interrogante de ¿qué cosas sí son recomendables hacer?, y justo te daremos respuesta en las siguientes líneas.
Incorpora tours virtuales en tus servicios inmobiliarios
Los tours virtuales son servicios que llevan poco tiempo en el mercado inmobiliario, pero que han marcado la pauta. Supone un ahorro de tiempo y dinero, y consiste en presentar al cliente el inmueble, con un recorrido virtual 3D de la vivienda en tamaño real.
Así el futuro comprador puede mirar desde distintas perspectivas la que será su próxima propiedad, sin perder detalles de la misma. También gozará de la comodidad de la tecnología, que ofrece visiones reales, en tiempo real y de forma más atractiva que la típica.
Permite a los clientes involucrarse en el proyecto desde cero
Sobre todo, cuando se trata de adquirir una vivienda que será el nuevo hogar de una familia, hay muchas emociones revoloteando. Siendo así, la recomendación es estimar esa ilusión del cliente, e involucrarlo en el proyecto inmobiliario, que es uno de sus proyectos de vida, desde el inicio.
Existen diversas maneras de hacerlo, por ejemplo: que pueda proponer decoraciones, estilos, color de las paredes, etc. Acciones que pudiese sugerir en tiempo real, o plantearlas como posibles remodelaciones. Todo se resume en una experiencia interactiva, personalizada y en tiempo real.
Publicita tus inmuebles en medios digitales
Si hay un aliado crucial para el sector inmobiliario en estos tiempos, es el Internet y sus maravillosas bondades. Son múltiples los sitios y formatos que esta red regala para comercializar productos y servicios.
En primera instancia, lo sensato es crear una página web propia. Eso sí, debe estar optimizada y modernizada, ya que es la impresión que tendrán los visitantes de tu trabajo. Asimismo, es vital sumar esfuerzos y apostar a las redes sociales, para aumentar la exposición de los inmuebles y la captación de compradores interesados.
Conclusión
El sector inmobiliario no puede quedarse estancado y mucho menos en prácticas obsoletas que dejaron de ser relevantes años atrás. Los clientes modernos se inclinan por servicios innovadores, atractivos y que les faciliten la vida. Es por ello, que admiran la versatilidad de la tecnología y cómo propició una nueva onda para comprar y vender inmuebles.
En pocas palabras, es indispensable que las agencias inmobiliarias se adapten a las necesidades actuales del mercado, y piensen en el beneficio tanto del propietario como del posible comprador.
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